Energía fotovoltaica: el papel clave del reshoring en Europa
En los últimos años, el crecimiento de la nueva energía fotovoltaica en todo el mundo ha sido constante y significativo, y las previsiones de los principales centros de investigación confirman esta tendencia positiva también en un futuro próximo. 3SUN es un ejemplo de cómo se puede crear una cadena de suministro solar totalmente europea.
Según se desprende del informe Snapshot of Global PV Markets 2023 elaborado por el centro de investigación IEA-Pvps (International Energy Agency – Photovoltaic Power Systems Programme), solo en 2022 se instalaron 240 GW de nuevas plantas en todo el mundo. Este dato marca un crecimiento del 37 % con respecto a 2021 (175 GW). Y para 2023, se estiman entre 350 y 400 GW de nuevas plantas.
El crecimiento de la energía solar es enorme, pero al mismo tiempo ha mostrado algunos aspectos críticos. En los últimos años, la fabricación de componentes fotovoltaicos se ha concentrado principalmente en los mercados asiáticos y la recuperación que siguió a la pandemia del Covid, junto con el conflicto entre Rusia y Ucrania, han agravado aún más esta situación, con el consiguiente aumento de los plazos de entrega de los suministros y de los precios. Dado que la nueva energía solar ha vuelto a crecer significativamente también en los países de la Unión Europea, desde hace un tiempo se ha vuelto a plantear todavía con más fuerza la necesidad de traer de vuelta a Europa parte de la producción (reshoring), con medidas concretas por parte de los gobiernos e iniciativas de la industria que podrían favorecer aún más esta realidad. Uno de los ejemplos más significativos en esta dirección es nuestra gigafactoría 3SUN de Catania.
Relocalización o reshoring: el papel clave para Europa y la transición energética
Pero, ¿qué papel jugará la relocalización en Europa para reducir la dependencia de China? Empecemos con algunos datos: la cuota de mercado del gigante asiático en el proceso de fabricación de los paneles solares supera a día de hoy el 80 %. Así lo señala la Agencia Internacional de la Energía (AIE) en el informe «Solar PV Global Supply Chains», según el cual la fabricación de componentes clave, como el polisilicio y las láminas, aumentará a más del 95 % en los próximos años. La AIE destaca todos los aspectos críticos de esta dependencia, empezando por la vulnerabilidad ante posibles «cuellos de botella» que podrían derivar en un aumento de los precios o incluso en retrasos en las entregas.
Frente a esa situación, la AIE pronostica una diversificación geográfica de la fabricación de los paneles. Y proporciona una serie de recomendaciones dirigidas principalmente a los gobiernos: fomentar la creación de fábricas en los grandes centros industriales, facilitar las inversiones con políticas fiscales adecuadas, garantizar una fabricación respetuosa con la sostenibilidad medioambiental y social, invertir en investigación tecnológica para mejorar el rendimiento de los paneles reduciendo sus costes, establecer normas que fomenten el reciclaje de los materiales para reducir la necesidad de utilizar materias primas que muchas veces, en el caso de las tierras raras, proceden de Asia y, por lo tanto, también de las importaciones.
Unión Europea: medidas y objetivos para apoyar el crecimiento del sector
Este escenario ha llevado a la Unión Europea a introducir medidas para dar respuesta al aumento de nuevas instalaciones fotovoltaicas previsto en toda la Unión.
Entre los objetivos fijados en el proyecto de plan de empresa Net-Zero, presentado el 14 de marzo, figura el de aumentar la capacidad de producción europea de tecnologías estratégicas para la transición energética hasta alcanzar al menos el 40% de las necesidades anuales de la UE. Entre las tecnologías consideradas cruciales figura la solar fotovoltaica. El objetivo del plan es acelerar el desarrollo de tecnologías ecológicas para reducir la dependencia de terceros países, entre ellos China. Pero eso no es todo, el 9 de diciembre de 2022, en Bruselas, la Comisión Europea lanzó oficialmente la Alianza Europea de la Industria Solar Fotovoltaica, a través de la cual Europa pretende alcanzar los 30 GW de capacidad de fabricación anual europea para 2025. El objetivo es traer de vuelta la industria fotovoltaica a Europa en todos los segmentos de la cadena de suministro, desde el silicio hasta el producto terminado. También pretende crear una posición competitiva en el contexto de la creciente demanda de energía fotovoltaica en Europa y en todo el mundo.
Recuperar la cadena de suministro europea del sector fotovoltaico también significa crear más valor en el mercado laboral. De hecho, la AIE estima que por cada GW de capacidad fotovoltaica que se produzca en Europa, se podrían crear 1 300 nuevos puestos de trabajo, mientras que la asociación SolarPower Europe habla de 400 000 nuevos puestos de trabajo directos e indirectos en toda la cadena de la energía solar ya en 2025.
3SUN: innovación y tecnología al servicio de una cadena de suministro interna
La experiencia de 3SUN es un ejemplo de cómo es posible, en Italia y, por lo tanto, en Europa, fabricar paneles fotovoltaicos de última generación que puedan competir en los mercados internacionales gracias a la tecnología más innovadora, combinando al mismo tiempo las necesidades de seguridad e independencia energética con las de la economía, el empleo y el medio ambiente. Un ejemplo perfecto de catalizador para la recuperación de la cadena europea del sector fotovoltaico.
La nueva fábrica de Catania se prepara para funcionar a pleno rendimiento a partir de 2024 y contribuir activamente de esta forma en la creación de una cadena de suministro de la energía solar comunitaria. De hecho, con una capacidad de producción de 3 GW al año, seremos la fábrica de células y módulos fotovoltaicos más grande de Europa.
Aumentar 15 veces la capacidad de producción, con 15 000 paneles fabricados al día, también debe ir acompañado de la calidad y la excelencia de los productos que saldrán de la gigafactoría.Nuestra tecnología de heterounión (HJT, Hetero Junction), llamada 3SUN CORE-H, garantiza el mejor rendimiento para fabricar módulos fotovoltaicos más eficientes, competitivos, duraderos y resistentes. Pero vamos más allá: estamos desarrollando una tecnología que sigue una estructura tándem, es decir, acopla la heterounión con la perovskita para ampliar el espectro de la luz solar convertible en corriente hasta la luz azul, aumentando la eficiencia tecnológica hasta más del 30 %.
El aumento de la capacidad de producción de 200 MW anuales a los futuros 3 GW también ha sido posible gracias al proyecto Gigafactory, a través del cual 3SUN fue seleccionada por la Comisión Europea en la primera convocatoria del Fondo de Innovación. La inversión total para este proyecto es de aproximadamente 600 millones de euros, de los cuales, 188,6 millones saldrán de los fondos públicos del Innovation Fund y del Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia italiano (PNRR).
Además, nuestra gigafactoría también puede aportar importantes beneficios sociales, económicos y medioambientales al país, tanto a nivel local como nacional y comunitario, empezando por la creación de puestos de trabajo: alrededor de 900 directos y 1 000 indirectos.